Creo que fueron las nubes que ennegrecían amaneceres,
o el sol que entre una tormenta, enredaba los placeres.
No se si fuera la luna las noches que no salía,
o el frío voraz insomne, las noches que me mordía.
Quizás el espacio y tiempo, las tardes que no existieron,
o las caricias y besos cuando desaparecieron.
También pudo ser mi rostro cuando me fui haciendo viejo,
o esta mañana gritando, me lo recordó el espejo.
No se si fuera mentira, no recuerdo la inferencia,
pero alguno de estos días, alguien me habló de tu ausencia...
- Sucio -
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