martes, 29 de abril de 2014

Quién dijo adios.



Entonces me di cuenta que somos de quien nos encuentra en pedazos y nos arma hasta dejarnos completos.
De quien no nos cambia, pero nos mejora.

Y así me doy cuenta que, si soy tuya me auto proclamo tuya, empezaste desde cero con paciencia, me aguantaste cuando yo no podía, me pegaste cada pieza y las faltantes las hiciste tu con cada palabra me diste de nuevo la confianza para volar, no me ataste, me liberaste cuando sabías que ya podía hacerlo sola.

Esperarte, mil años hasta que sea nuestro momento ¿porque? Porque quiero, porque puedo por que yo no tengo nada que perder pero si mucho que ganar.

Contigo se que es la ilusión que es el soñar que es el sonreír a media plática con alguien por que se que a ti te parecería una pendejada lo que dice y tendrías el valor de mandarlo a la chingada, porque un estando lejos supe conocerte quererte, adorarte.

Tal vez busque el pretexto más pendejo que encontré, y le eche la culpa a mi inmadurez pero si algo quiero es verte feliz.

Se esperar, soy paciente y confió en ese ser, en el que tu tanto crees para que un día me deje poder abrazarte.

No es un adiós es un, se feliz.
No es un me voy, es un seguiré aquí.  

No hay comentarios: